Porque los gatos son asustadizos
En primer lugar, es importante recordar que no todos los gatos son iguales. Hay gatos extrovertidos, tímidos, aventureros, cómodos y, por supuesto, temerosos y asustados (en determinadas situaciones). No todos los gatos son aventureros y quieren explorar nuevos territorios todo el tiempo, pero hay casos de gatos que prefieren estar tranquilos porque son tímidos y temerosos.
Falta de contacto temprano con los humanos
La cuestión es ésta: Si su gato está ansioso, es por una razón. Y lo más probable es que este comportamiento se deba a la falta de contacto humano temprano durante el periodo de socialización (cuando el gato es un cachorro y empieza a tener contacto con algo más que su madre y sus hermanos). Puede ser que si la socialización no se hizo correctamente, el gato tenga miedo de las personas.
Trauma
Un gato también puede haber sido traumatizado, que es una de las principales razones por las que tanto los humanos como los animales pueden sufrir un miedo extremo. El gato puede haber tenido una experiencia traumática de maltrato o algún tipo de miedo, por lo que tiende a reaccionar siempre según este patrón aprendido. Esto puede llevar a que los gatos tengan una verdadera aversión a los humanos y quieran esconderse siempre.
Gatos asilvestrados
Si has adoptado un gato asilvestrado o de la calle, también puede tener mucha ansiedad, ya que no ha estado bien expuesto a los humanos en sus primeros meses. Los gatos asilvestrados son difíciles de domesticar, por lo que puede resultar difícil convencerlos de que les gusten las personas.
Gatos de refugio
Lo mismo ocurre con los gatos de los refugios. En este caso, los gatos tienden a ser temerosos porque tienen mucha experiencia a sus espaldas y han convivido con muchos otros gatos e incluso perros durante mucho tiempo. Los gatos procedentes de refugios no suelen tener suerte, por lo que puede resultarles difícil adaptarse a la vida en casa.
Señales de que su gato está asustado
A continuación, te presentamos las principales señales de que tu gato está ansioso para que puedas reconocerlas y trabajar en ellas:
Se esconde todo el tiempo
Gruñe o te gruñe
La piel se pone de punta
Adopta una postura defensiva
Pupilas dilatadas
Se mueve con cada sonido
¿Cómo hacer que su gato no tenga miedo?
1. no lo agobies
El primer error que cometemos al intentar ayudar a nuestro gato es obligarle a estar con nosotros. Esto es un error porque lo vamos a agobiar mucho. El gato debe superar su miedo gradualmente, pero debe hacerlo por sí mismo, dándose cuenta de que no tiene ningún miedo real. No podemos obligarle a salir de su escondite, debe tomar la iniciativa él mismo.
2. Acércate a él
En segundo lugar, es importante que intentes acercarte a ellos poniéndote a su nivel, porque estar de pie es muy intimidante para ellos. Por eso, una forma de acercarse a ellos es tumbarse a su lado sin mirarlos a los ojos (mirar a un gato a los ojos es una forma de desafío). También es muy importante evitar los movimientos bruscos, ya que pueden asustarles.
3. utilizar los alimentos
La comida puede utilizarse como refuerzo positivo: Cuando sientas que tu gato está avanzando en el proceso de superación, puedes darle comida para que interprete que estar contigo significa recibir cosas buenas. De este modo, poco a poco irá asumiendo sus miedos y no rechazará tu compañía. c
4. Juega con él
Es una característica innata de los gatos querer jugar con todo a todas horas, especialmente jugar a la "persecución". Si tu gato se esconde y no quiere jugar, es porque tiene miedo, pero eso no significa que no lo necesite. Por eso, una vez superado el miedo, es importante animarle a jugar para que se descargue y gane confianza.
5. ser paciente
Si ves que tu gato está ansioso, lo más importante es, sin duda, tener paciencia. Tu gato te dará lo que tú creas que puedes dar, así que, como en cualquier relación, no puedes forzar nada. Una vez que se sienta cómodo con usted, se acercará gradualmente.
6. terapia
Como en el caso de los humanos, cualquier ayuda profesional es buena, y especialmente importante si tu gato ha tenido una experiencia muy traumática que no sabemos cómo afrontar nosotros mismos. En este caso, la terapia puede ayudar a su gato a sentirse seguro y a relajarse de nuevo.